La creatividad es la inteligencia divirtiéndose.

No hay una fórmula mágica, pero te cuento cómo encontrar inspiración y ser creativo en el día a día.

Creatividad es la inteligencia divirtiéndose, decía Albert Einstein, y para mí, es un componente primordial en la vida. No tienes que trabajar en alguna carrera relacionada con el arte o la publicidad para necesitar ese componente creativo que cambia completamente un proyecto, que le da vida y color, que demuestra cuánto cariño le pones a las cosas con apenas un pequeño guiño. 

Pero no todo el tiempo estamos inspirados, y la creatividad no es un botón que se enciende o se apaga, a menos de que entrenes tu cerebro para ello, la máquina que no tiene botón de apagado y que con la misma energía que se usa para preocuparse, se puede producir una idea creativa. 

Hoy les cuento algunas formas de encontrar inspiración y poner la creatividad a trabajar:

a.- Anota tus ideas. Te despiertas en la mañana y se te ocurre una idea que soluciona un problema que tuviste hace unos días, pero entre que te levantas y te tomas el café, se perdió. Anota todo, desde las buenas a las malas ideas, una vez que están en papel (o en un archivo digital) es más sencillo revisarlas, entender qué sirve y que no de ellas, armarlas y ponerlas a trabajar. Recuerda que ideas puedes tener mil en un día, pero en ejecutarlas está el truco y la diferencia entre los que triunfan y los que se lamentan.

b.- Lee y aprende cosas nuevas. Trata de leer libros, cuentos, artículos relacionados con tu área de conocimiento, pero también lee de temas de los que no tengas la menor idea, que aprender cosas nuevas es un gran y delicioso alimento para la mente. En estos meses de pandemia he hecho varios cursos y talleres para mejorar mi creatividad y mis técnicas: desde un maravilloso Taller de Escritura de Cuentos con Marianne Díaz Hernández en Santiago de Chile, a un Taller Punk de Storytelling y Escritura de Guión Cinematográfico con Marcel Rasquin en Los Angeles, pasando por las Masterclass de Malcolm Gladwell,Neil Gaiman, Jeff Goodby, Steve Martin, Judd Apatow y hasta una con Chris Voss (que fue negociador de rehenes del FBI).

c.- ¡Música!. Escucha y canta una canción todos los días, es muy distinto trabajar, escribir, pensar con música que sin ella. Tengo un ritual de fin de semana en el que cocino para mi familia para sentarnos a compartir y conversar, y es mágico entrar a la cocina, poner una canción, cantar, bailar mientras voy preparando lo que vamos a desayunar. Es un momento que atesoro y es de las cosas que más aprecio al llegar el sábado. 

d.- Haz algo que te guste. Como en el ejemplo anterior, les hablé de que cocino, pues no solo lo hago para alimentarnos, sino porque es algo que me gusta hacer y me relaja muchísimo. Piensa en eso que te gusta hacer y dedícate un rato a ti mismo, tu mente también se va a relajar y las ideas estancadas van a fluir.

e.- Cambia de escenario. Una de las cosas que hacen que cambie tu vida por completo es viajar. Conocer nuevos lugares o visitar esos sitios que te gustan y te alegran la existencia. Grandes pensadores tuvieron esas grandes ideas conociendo nuevos horizontes, pero también cambiando de escenario de una forma más sencilla. Ahora no es tan sencillo viajar en avión o al menos sentarse en un café para cambiar de escenario, pero incluso cambiando de lugar de trabajo en tu home office logras el objetivo de hacer que tu mente se relaje de la rutina, (una o dos veces a la semana me siento en el patio a trabajar y así cambiar los sonidos, la iluminación, incluso la postura al trabajar).

f.- Ejercítate. El poeta romano Juvenal decía en sus Sátiras aquello de Mens sana in corpore sano, y obviamente necesitamos tener un cuerpo sano para mantener nuestra mente sana, funcionando cómo debe ser, generando ideas creativas y solucionando problemas. Es cosa de tener un poquito de disciplina, si yo lo hago, seguro ustedes lo pueden hacer.

g.- Inspírate en otros. Como les dije, veo las clases de Masterclass todos los días en la mañana, al menos dos mientras corro en la caminadora. Pues busca esos autores y personas que te inspiran, sea un chef famoso o un escritor, seguramente hay una biografía, un documental, un artículo que habla de esas personas. Una charla TED, (que hay muchas y de todos los temas posibles), es un buen punto de partida. En fin, investiga qué han hecho esas personas que admiras, o simplemente sigue a esa gente que es exitosa en el campo en el que trabajas o quieres trabajar y nútrete de ellos.

h.- Acepta que a veces simplemente tienes que descansar. A veces tu cerebro no da más, estás fatigado, quemado, ya no tienes ganas de nada. Pues descansa, duerme una siesta, siéntate a ver a tu mascota jugar o juega con ella, pasea, medita, sírvete un té y deja que tu cerebro descanse. No todo el tiempo puedes tener una idea fresca si tu cerebro no lo está.

Estas son algunas de las muchísimas formas de ejercitar tu cerebro, hacer espacio para la inspiración y así poder transformarla en acciones creativas en tu día a día. Como decía Steve Jobs, «la única forma de hacer un gran trabajo, es amar lo que haces».

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